El pasado sábado 4 de Febrero asistimos a la conferencia taurina organizada por la Asociación Taurina “16 de agosto”, cuyo protagonista fue Javier Solano, famoso periodista que puso voz a los encierros de Pamplona en televisión española durante más de 30 años. La conferencia llevaba por título “Jugando a no morir”.
Javier Solano comenzó la tertulia agradeciendo a la directiva de la Asociación “16 de Agosto” la invitación de acudir a Brihuega. Comenzó expresando que para él había sido toda una sorpresa y un descubrimiento el tradicional Encierro por el Campo de Brihuega del 16 de agosto, ya que dicho encierro cuenta con un trayecto urbano y campestre y además cuenta con distintas fases. Pero la que más le impresionó sin duda fue: “Traer los toros por la noche es muy sorprendente”. También expresó que le impresionó por vídeos que pudo ver, el ambiente previo al encierro, y sobre todo como desde los niños hasta los más mayores, llevan esa indumentaria blanca y roja igual que los Pamploneses durante los sanfermines.
Posteriormente pasó a explicar que el título elegido para la conferencia “Jugando a no morir”, era el de una película de hace algunos años. Y es que Javier Solano así apostilló: “En un solo instante un toro mueve la cabeza y te mata, porque algunos corredores van a menos de un metro”.
Javier Solano Solano comentó que él cumplió un ciclo de 15 años corriendo los encierros, y que en su época había presión social entre los varones para que cumplieras con el rito de correr el encierro: “Eso te convertía a ser un adulto Pamplonés, pero ahora todo eso ha cambiado mucho porque el 50% de los que están en la calle son extranjeros”.
El periodista ya retirado quiso dar un dato muy interesante. Y es que entre el siglo XX y el siglo XXI ha habido un total de 15 muertos en el encierro de Pamplona, lo que se traduce que teniendo en cuenta que se habrán corrido por las calles unos 4500 toros en unos 100 años, con una duración de 60 horas y rodeados de cerca de 1 millón de personas: “15 muertos es poco, las posibilidades de morir son muy pequeñas, lo que pasa que un muerto en un encierro de Pamplona tiene una relevancia a nivel mundial. En los pirineos mueren al año 15 ó 20 personas y no sale en prensa, o se ahogan en los veranos unas 1.000 personas en España y tampoco sale en la prensa. El problema es que el Encierro de Pamplona está vigilado por lupa, y cualquier hecho y tragedia tiene muchísima relevancia”. Javier Solano comentó que los políticos están muy tentados a suspender los encierros en caso de que se produzca cualquier tragedia.
Después quiso expresar que los encierros en la actualidad: “Son muy normalitos, son todos iguales, no hay toros sueltos y hay muy poca chicha. En un encierro normal 1 de cada 70 termina el encierro con algún tipo de herida. 1 de cada 1.500 tiene un golpe traumatismo cerebral con heridas importantes. 1 de cada 7.000 tiene una cornada leve y 1 de cada 100.000 muere”.
Solano comentó que en Pamplona existe una perfecta organización del encierro: “Todo lo previsible está previsto”. Cuenta con unas seiscientas personas, y 250 de ellas son sanitarios.
Javier tiene su teoría del porque la lista de heridos en cada encierro es tan pequeña teniendo en cuenta los miles de personas que corren diariamente. El piensa que los seis toros de lidia y los cabestros hacen el efecto manada, y eso los convierte en que los toros sean más inofensivos: “Los toros evitan coger a la gente. En los primeros 300 metros ellos consideran que es una amenaza para ellos de ahí que los toros siempre tiendan a ir juntos”. Para Solano hoy en día las carreras son violentísimas y llenas de golpes. También expresó que aguantar ahí en la carrera es de tener mucha fuerza mental y considera que: “Sentir miedo es hasta bueno”.
Posteriormente pasó analizar cómo se encuentra la tauromaquia. Considera que hay una falta de interés de la Tauromaquia convencional, sin embargo nunca ha habido tanta gente en la tauromaquia popular, contradiciendo así que está bajando la tauromaquia tradicional. Pero explicó que: “Como todos sabéis el encierro es el preludio de la corrida, es un traslado, y si por la tarde no hay corrida ¿pues que sucederá con los encierros?”.
También explicó que en Pamplona es el sitio donde más caro se pagan los toros, ofreció el dato de que una corrida de toros vale unos 70.000 euros. “Cada toro sale por unos 10.000 ó 12.000 euros”.
Para terminar y como colofón final, Javier se atrevió a narrar mediante un video que se proyectó, el último encierro que corrió por las calles de Brihuega levantando del asiento a todo el público presente que llenó el salón.
Esta conferencia contó con la colaboración del Ayuntamiento de Brihuega, el Hostal “Villa de Brihuega” y la administración de lotería Doña Isabelita.
